Y cuando sus alas los envuelvan, entregaos a él. Aunque la espada que oculte bajo sus alas pueda heriros..
Y cuando les hable, creed en él. Aunque su voz pueda arrasar vuestros sueños, así como el viento del norte arrasa los jardines.
Y cuando les hable, creed en él. Aunque su voz pueda arrasar vuestros sueños, así como el viento del norte arrasa los jardines.
Porque aún siendo el amor como una recompensa, también será castigo para vosotros. Porque él os hará crecer, pero os frenará después. Aunque ascienda hasta vuestras alturas y acaricie vuestras fibras más sensibles, esas que se estremecen bajo la caricia del sol. Así descenderá hasta vuestras raíces y las agitará por muy arraigadas que se encuentren en la tierra.
Cual mazorcas de maíz os reunirá junto a él. Os azotará para que sintáis vuestra impotencia. Os agitará hasta despellejaros. Os molerá hasta lograr que blanqueéis. Os amasará hasta dejaros flexibles. Y luego os destinará a su fuego sagrado para convertiros en pan bendito en la fiesta sagrada de Dios. Todas estas cosas hará el amor con vosotros para que conozcáis los secretos del corazón, y con ese conocimiento convertiros en un fragmento del corazón de la Vida.
Pero si presas de temor buscáis tan sólo la paz del amor y el placer del mismo. Entonces será preferible que tapéis vuestras desnudeces y escapéis de la agitación de amor. Y entréis en ese mundo sin estaciones donde podréis reír, pero sin que llegue a ser completa vuestra risa, y lloraréis, pero sin verter todas vuestras lágrimas..