【мιι • υηιкα • αdιccιση】ϟ*

Ken y yo vamos muy bien..

El mes que viene cumplimos ya diez meses..

Él es un chico estupendo y el mejor novio.. que he tenido.

Todo va muy bien, como ya lo mencioné antes,

Y tanto él, como yo, queremos casarnos y ser muy felices..

Pero para eso falta mucho...

Falta, por lo menos,

Que terminemos la universidad.....

- ¡JENNY!

El imprevisto grito que vociferó mi mamá me había dado tan tremendo susto que hizo que me sobresaltara en mi asiento, hecho, que le provocó algunas risitas de mofa a mi madre.

- ¡Mamá! –le protesté– ¡Te dije que no me gusta que me interrumpan cuando estoy escribiendo!

Mi mamá puso los ojos en blanco.

- Disculpe señorita pero su comida está servida desde hace rato... ¿Qué espera?

- Si, si, si.. ahorita voy ma’

Hice ademán de levantarme... Pero antes cogí mi diario.

- No vas a escribir en la mesa, deja tu diario ahí.. –dijo señalando uno de los cajones  pertenecientes a la parte inferior de mi cama– Nadie lo va a coger..

- ¿Cómo sabes que siempre lo guardo ahí? –le pregunte con perspicacia.

- …Ups!

- ¡¡MAMÁÁÁ!!

 ¡¡NO HUYAS!!

¡Parece que nadie respeta mis cosas! En fin, mi mamá me había servido la comida y yo tenía hambre así que la deje ir por esta vez, decidí mejor no tomarle importancia y comer tranquila. Pero mi mamá empezó de nuevo.

- ¿Te gusta la comida?

-Ah

- Ya Jennie, ya te he dicho que no he leido much..nada! Sólo un día ví que lo  guardabas ahí y por eso te sugerí..

- Ya.

- Aún así, hija, no sé por qué te molestas tanto..

- Má, estoy comiendo.

- ..porque si escribes algo es porque que algun dia alguien lo va a leer, no? es lo más lóg..

- ¡Adios! -agarré mi plato y me dirigí a mi cuarto.

Puse música relajante y traté de respirar profundo, cogí mi diario y me puse a escribir lo que acababa de ocurrir.

..sé que no es bueno alterarme así pero a veces me sacan de quicio!

Cuando acabé, me levanté para dejar el plato en la cocina (tenía que verla otra vez), caminé lo más rápido posible.

Bueno, nadie noto mi presencia. Mi mamá limpiaba la mesa y mi hermanito veía la tele. Me ignoraron olímpicamente, ¿cómo yo quería, no? O no..

 ..

....